Source: ABC.es
No se han establecido límites de captura por parte de los países que más marrajo pescan, entre los que se encuentra España, lamentan las ONG.
La Shark League, coalición dedicada a la conservación de los tiburones, ha solicitado la prohibición de las retenciones de tiburón mako, marrajo común o de aleta corta (Isurus oxyrinchus) en el Atlántico Norte (basada en recomendaciones científicas) y en el Atlántico Sur (basada en el enfoque preventivo), al considerar que supone un primer paso hacia una conservación efectiva de la especie. Así lo ha manifestado la organización con motivo de la reunión anual de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT, por sus siglas en inglés), que se celebra desde el lunes y hasta el viernes en Marrakech.
Los tiburones se encuentran entre los animales más vulnerables capturados en el alta mar por la pesca de atunes y de peces espada. Ahora están ahora gravemente desprotegidos, apuntan desde la plataforma conservacionista. La más valiosa de las especies de tiburones es el mako, aseguran; pero no se beneficia de ningún límite internacional de captura, advierten. La última evaluación de las poblaciones del Atlántico Norte concluye, de hecho, su agotamiento, remarcan las mismas fuentes. En opinión de la Shark League, la «deficiente prohibición de la ICCAT sobre el aleteo no está en línea con las buenas prácticas»; la sobrepesca y el desperdicio de los tiburones tienen efectos ecológicos y económicos muy negativos, explican. El ICCAT, recuerdan, puede fijar normas para la conservación de los tiburones en 50 países y la Unión Europea (UE).
«Las recomendaciones científicas previas de limitar o reducir la mortalidad de los makos no han sido escuchados», se quejan desde la organización. E insisten en que «ningún límite de captura se ha establecido ni por parte del ICCAT ni por parte de los países que más pescan esta especie tan vulnerable a la sobrepesca», entre los que citan a España, Marruecos y Portugal.
Las capturas de tiburón mako, según científicos del ICCAT tras una evaluación reciente realizada en el Atlántico Norte, deben ser reducidas a cero para permitir la recuperación de los stocks en dos décadas. La medida de conservación más efectiva e inmediata, a tenor de sus resultados, sería la prohibición total de las retenciones, dado que la sobrepeaca de la especie ocurre sobre una población ya sobrepescada, comparten desde la Shark League.